El propietario tenía alquilado un local que ya había estado destinado a peluquería, por lo que se trató de aprovechar al máximo las dotaciones e instalaciones existentes para minimizar la inversión inicial.
Se propuso mantener la tabiquería existente redefiniendo los espacios mediante mamparas y el mobiliario, manteniendo un espacio dinámico. Se realizó el diseño del mobiliario según las necesidades del cliente, buscando la integración con el local y el estilo de decoración elegido.
Se dotó al local de una rampa para salvar el desnivel que tenía con respecto a la acera de la calle en la zona del acceso.